RATAS!
Que alguien me explique!
Houston, hay ratas en el departamento. Bueno, no exactamente EN el depa, pero si en el edificio.
OMG!
Encontrábame (XD) bajando las escaleras del depa para ir a la tienda cuando me di cuenta de que algo se movía en el zaguán (ja, qué bien se siente decir palabras difíciles y/o en desuso) y me di cuenta que era una rata. Primero pensé "oh, una rata!" y cuando me di cuenta que no es nada bueno tener una de estas criaturitas de la creación como vecina pensé "OMFG UNA RATA!". No puedo negar que me quedé paralizada en las escaleras, aunque realmente no tenía miedo porque me separaban una puerta de cristal y bastantes escalones. Después de estar viendo a mi nueva amiga ir y venir un rato por la entrada, llegaron unas señoras (que de seguro venían a pedir trabajo a la oficina esta de productos del estilo Omni-Life en jodido) y tocaron la puerta. La listísima de Margarita *así le puse a la rata* se escondió en cuanto las escuchó llegar, of course. Yo no podía dejar de ver a las señoras tocando el timbre y a la rata que estaba detrás de una maceta, y no sabía si bajar para abrir la puerta y decirles a las señoras que Margarita estaba ahí. Me hubiera dado MUCHA risa verlas gritar y brincar. Pero bueno, me aguanté las ganas, no les dije nada y les abrí la puerta de todos modos (sin dejar de ver a Margarita). En ese momento la pequeña (o no) salió del edificio y se fue, (supongo que ahora vivirá en las plantas de a un lado) y las señoras entraron felizmente al departamento/oficina de productos jodidos. No cabe duda que la ignorancia es felicidá'.
Ah, y por supuesto yo me fui a la tienda *caminando rápido, no fuera a ser* y me compré unos nutritivos y deliciosos rancheritos y tostitos. YUMMY.
P.D. Le quería tomar una foto, pero en eso llegaron las señoras (MALDITAS!) y ya no pude, pero si la vuelvo a ver lo haré :D.
I'll miss you, Margarita (L)
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Abro los ojos y son las 4:50 de la mañana "Chingados!". Quiero dormir pero no puedo. Me levanto y me alisto. Checo el reloj y apenas son las 5:20 de la mañana. Me espero a que salga el sol mas o menos. Y me fui a caminar por Tlalpan. Caminé y caminé. Llegué al mercado de las flores, habia unas amarillas hermosas que pensé en regalarte. Lástima. Seguí caminando y caminando hasta que llegué al centro de tlalpan. No habia nadie. Nadie. Me senté en la plaza. Estaba todo relajado cuando una rata pasa enfrente de mi. Oh, una rata. Pensé. La vi verme, y ella me vió. Pero ninguno de los dos reaccionó violentamente. Creo que hasta nos caimos bien. Inmediatamente supimos que nuestra amistad no iba a ser bien vista por la gente. Asi que ella siguió su camino y yo seguí esperando que el dia terminara de empezar.
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